El fin del periodo de ultraactividad de los convenios en negociación cumple hoy. En vistas a esta fecha, los sindicatos han mostrado su indignación por el hecho de que los empresarios no hayan convocado siquiera la mesa negociadora para renovar el convenio provincial de canteras y serrerías, que expiró en marzo de 2012, y que deja sin protección a unos 3.000 trabajadores.

Por este motivo, unos 50 delegados y responsables sindicales de UGT y CCOO se han encerrado en la sede patronal en Macael (Almería) para exigirles el inicio de la negociación antes de que acabe el día. Así lo ha anunciado el responsable de Acción Sindical de Metal, Construcción y Afines (MCA) de UGT- Andalucía, Jesús Ordóñez, quien defiende que "la negociación colectiva es un derecho del trabajador y no puede depender de la buena o mala voluntad de la otra parte (la empresarial)". Recrimina que en un año "ni siquiera se hayan dignado a convocar la mesa para iniciar las negociaciones", algo que denunciaron ante la Delegación de Empleo en octubre pasado. "De haberlo hecho", explica, "nos garantizaríamos al menos seis meses más de prórroga para negociar el nuevo convenio".

Ante esta situación, el convenio provincial de canteras y serrerías está condenado a desaparecer hoy y los trabajadores pasarían a regirse por un convenio de empresa propio o uno de categoría superior (en este caso en el convenio general de la construcción) "algo que les perjudica porque hay fijado un salario mínimo único para los trabajadores de este sector y no garantiza en absoluto ni los derechos ni las mejoras salariales que tenían adquiridas  hasta el día de hoy", añade Ordóñez.

En señal de protesta y después del  Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales (Sercla) del pasado 5 de julio (que resultó sin avenencia) los sindicatos UGT y CCOO han iniciado un calendario de movilizaciones con el fin de mantener la protección de estos trabajadores.